Dale a un niño el consuelo de un defensor comprensivo.

Tu donación proporciona a un niño el apoyo constante y cariñoso de un voluntario CASA capacitado que estará a su lado durante las fiestas y durante todo el año.

Las fiestas son diferentes para los niños en acogida temporal

Para muchos de nosotros, las fiestas traen consigo tradiciones familiares como reuniones familiares, comidas favoritas que solo se sirven en estas fechas y la comodidad de estar en casa.

Pero para los niños en acogida, esta temporada suele ser muy diferente.

Muchos pasarán las vacaciones lejos de sus familias, en hogares desconocidos, rodeados de personas a las que apenas conocen. A menudo se echa en falta el sentido de pertenencia que la mayoría de los niños disfrutan en esta época del año.

Cada día, en el condado de Tarrant, hay niños que ingresan en el sistema de acogida porque su hogar ya no es seguro.

Necesitan un defensor que se asegure de que sean vistos, escuchados y nunca olvidados.

Asegúrate de que todos los niños tengan a alguien que los apoye.

Tu donación ayuda a que un niño en acogida sea asignado a un defensor especial designado por el tribunal que:

  • Acompaña a los niños a las audiencias judiciales.

  • Les brinda apoyo a través de acogida temporal.

  • Les ayuda a adaptarse a los cambios escolares.

  • Garantiza que sus intereses estén siempre en el centro de cada decisión.

El año pasado, CASA del condado de Tarrant atendió a más de 820 niños en acogida temporal. Gracias a donantes como usted, casi la mitad de estos niños, muchos de ellos menores de cinco años, tuvieron a alguien a su lado durante una época aterradora e incierta.

La historia de Rebecca

Rebecca* entró en el sistema de acogida a los nueve años.

Cuando cumplió quince años, ya había pasado por ocho hogares de acogida y había asistido a ocho escuelas.

A través de cada mudanza, cada nueva clase y cada momento difícil, ella tenía una constante:

Su voluntaria de CASA, Anne.

Anne se sentó con ella durante los momentos más difíciles, celebró sus victorias y colaboró estrechamente con sus profesores. Horneó galletas con ella, revisó informes de progreso y estuvo presente, una y otra vez, durante cinco años.

Pronto, Rebecca tendrá un hogar definitivo.

Pero durante cinco largos años, cuando podría haberse perdido en el sistema, no fue así porque tenía a un defensor a su lado.

Tu generosidad ayuda a que historias como la de Rebecca sean posibles.

Esta temporada, puedes aportar consuelo y esperanza.

Tu generosidad cambia el significado de las fiestas para los niños en acogida, sustituyendo la incertidumbre por comodidad y la soledad por esperanza.

Gracias a ti, los niños de todo el condado de Tarrant saben que se les ve, se les escucha y se les cuida.

*Se han cambiado los nombres por motivos de privacidad.