¿Por qué decidió venir a trabajar para CASA? Anteriormente había trabajado como voluntaria con CASA en Alabama y me di cuenta de que se necesitaba algo más para concienciar y defender a los niños tutelados. Y aunque a veces puede ser un reto, fue una experiencia gratificante, y tuve la oportunidad de conocer a gente increíble. Así que cuando me mudé a Texas, me pareció que CASA sería una buena opción.

¿Cuál es su formación profesional y educativa? Tengo una Maestría en Trabajo Social.


¿Qué fue lo primero que le hizo implicarse en CASA? Después de trabajar en el campo de la medicina durante varios años y quería un cambio. Un amigo me animó a solicitar un puesto en CASA y recibí una oferta de trabajo y la acepté.

¿Qué te hace volver cada mes para ayudar a CASA? Como empleada de CASA, escuchamos tantas historias desgarradoras y situaciones de familias que están o han experimentado algún tipo de abuso, explotación o negligencia. He visto de primera mano la diferencia que CASA hace alentando a los niños y apareciendo para abogar por su mejor interés.

¿Cuál ha sido la parte más gratificante de ser parte del personal de CASA? Yo tendría que decir ver a los niños en el cuidado de encontrar su hogar para siempre, con familiares o una familia adoptiva. Participar en el Día Nacional de la Adopción de este año me hizo tomar conciencia de por qué hacemos lo que hacemos.

Por favor, comparta con nosotros un momento especial de su trabajo con los voluntarios o simpatizantes de CASA. Valoramos a nuestros voluntarios y reconocemos que cada uno de ellos aporta un conjunto único de conocimientos y habilidades, ya sea una formación en informática, experiencia en el ministerio, o un título en educación. Nos motivan para hacer más y explorar nuevas vías para llegar a más familias necesitadas, ya que ofrecen desinteresadamente su tiempo, energía y talento.

¿Qué le diría a un colaborador potencial? Siempre hay una necesidad que cubrir con los niños y las familias a las que servimos. Ya sea construyendo una relación positiva con un niño, ayudando con eventos comunitarios, o donando fondos para que CASA pueda servir a más niños necesitados. Todos ellos son esenciales para hacer una diferencia en la vida de un niño.

¿Por qué cree que es importante que su comunidad local apoye a CASA y lo que hacen? He aprendido que a veces no siempre podemos realmente entender o incluso ver el impacto que podemos tener en las comunidades que servimos, pero tenemos la oportunidad de plantar una semilla cada vez que nos encontramos con un niño y una familia necesitada, mostrando bondad y ayudar a recordarles que son vistos, atendidos y escuchados.

Nunca subestimes el poder de aparecer o de prestar oídos porque eso dice mucho a un niño o a cualquier persona cuyo mundo se ha venido abajo.

¿Quierescompartir algunas palabras de aliento con nuestros voluntarios? He visto y oído innumerables historias sobre por qué se retira a los niños del cuidado de sus padres, y mi oración es que algún día las historias sobre cómo las familias se han reunido y reconstruido con amor y apoyo superen a las primeras.